Niebla del Riachuelo
…amarrado al recuerdo
te sigo esperando
Edmundo Rivero
“Niebla del Riachuelo” (1937)
Como el tango de Edmundo Rivera, el río Matanza-Riachuelo recuerda muchas veces a una historia de melancolía y lucha; lamentablemente se ha hecho tristemente célebre por ser uno de los más contaminados del mundo.
La cuenca ocupa una superficie total de 2.200 km2 y cuenta con centenares de afluentes (entre arroyos, riachos y canales). Desde su nacimiento atraviesa 14 municipios bonaerenses y parte de CABA. Finalmente desemboca en el Río de la Plata, en la llamada Boca del Riachuelo.
Dentro de su recorrido se pueden identificar tres áreas, diferenciadas por su ubicación como también por sus contaminantes. En la cuenca alta, donde nace, se reciben descargas orgánicas, plaguicidas y sedimentos. En la media, se registran vertidos de efluentes (de origen industrial y domiciliario) y de los basurales a cielo abierto. Finalmente, la cuenca baja comienza donde se rectifica el río Matanza hasta su desembocadura. A partir del Puente La Noria, cambia de nombre por el de Riachuelo. Esta zona recibe vertidos de origen industrial y domiciliario con un elevado nivel de metales pesados y compuestos orgánicos tóxicos.
La cuenca baja se caracteriza por poseer terrenos con poca pendiente, lluvias estacionales marcadas y una importante zona del suelo cubierta por edificios y pavimento, lo que aumenta las posibilidades de inundaciones en un área muy contaminada.
Actualmente existen más de 5.000 industrias identificadas en la zona baja, cuyas actividades principales están relacionadas con la carne, cueros, petróleo y química. Además, la inexistencia de redes cloacales adecuadas, de tratamientos de efluentes y de destinos apropiados para los residuos, son factores decisivos para que continúe la contaminación atentando contra el ecosistema y la salud de las personas. En total, los ríos de la cuenca reciben por día: 368.000 m3 de aguas residuales domésticas y 88.500 m3 de desechos industriales, en su gran mayoría sin tratamientos previos.
El Riachuelo está vinculado con la construcción histórica de una parte de nuestro país y de la identidad de su población. Eso se observa en aspectos como su industrialización, inmigraciones, sindicatos, asociaciones, actividades artísticas y el reconocido patrimonio arquitectónico. Más del 10% de la población de la república Argentina se encuentra asociada a la cuenca y aproximadamente 800.000 viven en la cuenca baja.
Frente a esta problemática socioambiental, es necesario que se instale en la agenda pública el debate sobre la matriz productiva deseable en la región, el control real sobre las industrias contaminantes, proyectos que permitan el tratamiento de residuos cloacales y programas concretos de reurbanización. Para esto será indispensable disminuir la fragmentación institucional y articular con normas que estimulen el desarrollo sustentable. Como última reflexión resulta importante destacar el valor de la participación ciudadana como actor de control y defensor de los territorios.
Andrea Truffa
Docente y comunicadora ambiental